
Hace algunos años tomé la decisión de creer en Dios. La decisión tuvo que ver adicionalmente con el reconocimiento del poder sanador de
María y de sus efectos en mi persona. La experiencia fue interesante sobre todo por el hecho de entender que la
fé es pelonamente un asunto de decisión. A partir de ahí inicié un periplo largo y retorcido para poder adentrarme en un proceso de crecimiento espiritual que ha incluido muchas cosas. Una de ellas ha sido escuchar (que no dialogar) a mi padre (no el celestial, sino el de carne, hueso y tuétano) acerca de la espiritualidad. El tema ha dado para cosas como las que siguen:
- Cómo pueden comportarse bien los que no creen, si aparentemente no cuentan con un referente ético estructurado.
- Cómo los que no creen pueden aspirar a tener un vida y una muerte ajena a la soledad y a la desesperanza.
- Cómo pueden tolerarse creyentes y no creyentes
- Cuáles son las posibles variedades de la experiencia religiosa
En otras entregas ire explorando con detalle mis propias conclusiones al respecto. Por cierto acabo de inaugurar un grupo en google llamado "profesionales católicos". Los y las interesadas pueden visitarlo
siguiendo esta liga...
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