Los niños creativos

Es interesante para quienes somos papás treintañeros el tema de la creatividad. No hay duda de que el perfil del profesionista exitoso de estos tiempos incluye esta característica: ser creativos. Para nosotros que estamos en la plenitud de nuestra vida productiva, la creatividad es una herramienta indispensable para nuestra vida laboral cotidiana. Por eso es tna importante el asunto cuando pensamos en nuestros hijos, porque la creatividad será uno de los pilares sobre los que se se construirá el futuro: mientras más creativos sean nuestros hijos e hijas, más posibilidades tendrán de enfrentar con éxito los desafíos de los caminos profesionales que escojan en el futuro.
Pero ¿cómo hacerle para formar niños creativos? la mayoría de las escuelas (particulares u oficiales, es la misma realidad en el fondo) buscan la homogeneidad en sus alumnos, no lo contrario; muchas veces los niños creativos resultan anómalos en el grupo escolar, por lo que sus iniciativas son inhibidas, antes que alentadas. Los niños creativos enfrentan las pretensiones igualitarias de sus profesores, y es que es más fácil atender a un grupo en el que todos sean y se comporten más o menos igual que a algún grabanzo que brinque con una idea descabellada de pronto.
Como en muchas otras cosas, la clave de esto está en el seguimiento cercano que los padres hagan de sus hijos, y en la atención de los grandes a los chicos; hay que escuchar sus ideas -por mus descabelladas que sean-, respetarlos, cuidar de su dignidad, ofrecerles un espacio seguro para expresarse, en donde el niño sepa que no habrá quien lo regañe o se burle de las perlas surgidas de su cabecita.
Como en el mundo de los adultos, no todas las ideas infantiles creativas son buenas, ni practicables, así que junto a la creatividad el niño habrá de aprender a ser pragmático, útil, a discernir entre lo que sirve y lo que no...