jueves, 26 de julio de 2007

Papiroflexia

Una de las tareas más chidas para hacer con los hijos este verano en casa es el origami. Se trata de una práctica milenaria, proveniente del Oriente, que puede ocupar laaaargas horas (para esos momentos en que no hallas qué poner a hacer a tus hijos que andan como leones enjaulados, es ideal).
También hemos usado esta actividad para el trabajo de desarrollo de las habilidades motrices finas con niños especiales, con muy buenos resultados.
El chiste es iniciar con trabajos sencillos, que nos permitan ir avanzando en el dominio de esta técnica poco a poco, para ir logrando obras cada vez más complejas y vistosas. También es padre trabajar con papel de diferentes colores y texturas. Además el trabajo con origami te permite la sensación de estar creando algo con tus manos; de tu esfuerzo aparecen barcos, aviones, animales, seres fantásticos...
Puedes encontrar patrones de figuras de origami aquí, aquí y también acá.

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